lunes, 29 de enero de 2007


Aca unos parrafos del capitulo siete de la bruja de porto bello; una obra mas, si bien de este autor como de otros tantos destacados, que muestran q los ratos dificiles son parte de la vida. Tomando las palabras de una persona bastante especial para mi: "la vida es una bahia hermosa, en que los barcos vienen y se van"...pero yo he aprendido que todos estos barcos, te dan lecciones de vida.. y cuando menos te lo esperas, algunos dejan tesoros que te acompañaran toda la vida.

Empecé a caminar sin rumbo por Londres, blasfemando contra la vida que había escogido, el hijo que había aceptado, la mujer que ya parecía no sentir el más mínimo interés por mí. Entré en el primer bar, cerca de una estación de metro, y me tomé cuatro whiskys. Cuando el bar cerró, a las once, fui a una tienda de esas que están abiertas por la noche, compré más whisky, me senté en un banco de la plaza y seguí bebiendo. Se me acercaron un grupo de jóvenes y me pidieron que compartiese la botella con ellos, yo me negué y me pegaron. Apareció la policía y acabamos todos en comisaría.
Me soltaron después de prestar declaración. Evidentemente, no acusé a nadie; dije que había sido una discusión sin importancia, o tendría que pasar algunos meses de mi vida teniendo que comparecer ante tribunales, como víctima de agresión. Cuando me disponía a salir, mi estado de embriaguez era tal que me caí encima de la mesa de un inspector de policía. Se enfadó, pero en vez de arrestarme por desacato a la autoridad, me echó hacia afuera de la comisaría.
Y allí estaba uno de mis agresores, que me agradeció no haber llevado el caso adelante. Me dijo que estaba muy sucio de barro y de sangre, y me sugirió que me pusiera otra ropa antes de volver a casa. En vez de seguir mi camino, le pedí que me hiciese un favor: que me escuchase, porque tenía una necesidad inmensa de hablar. Durante una hora escuchó en silencio mis quejas.






2 comentarios:

Felipe Pérez dijo...

Es verdad, cada barco da una lección de vida. Cada uno opta por tomar o dejar cada uno de aquellos barcos, sopesando lo bueno y lo malo. No se trata de llegar y tomar un barco, por el contrario se requiere prudencia, templanza y valentía. Espero que tu barco no se vaya de mi bahia.

Besos

Srta.-AleXaNdRa-ZPT dijo...

nop imposible..mientras tu barco siga en la mia